Pekín.– El debate en Pekín sobre la inteligencia artificial (IA) y el rol de China en este campo fue crucial, con expertos chinos y europeos compartiendo sus perspectivas sobre la regulación y los desafíos que enfrenta esta tecnología.
Los embajadores de la Unión Europea y España en China, Jorge Toledo y Rafael Dezcallar, respectivamente, subrayaron la importancia del diálogo entre la UE y China para abordar los desafíos regulatorios y sociales que la IA plantea, especialmente en términos de empleo.
Alicia García Herrero hizo hincapié en aprender de la lucha contra el cambio climático y en la importancia de la coordinación para mitigar los efectos negativos de la IA. Se prevé una competencia por el talento entre las potencias mundiales debido a esta tecnología.
Los expertos hablaron sobre la evolución de la IA, su presencia creciente en entornos no digitales como la conducción, y señalaron desafíos como la privacidad, la opacidad de los algoritmos y la huella de carbono. Destacaron la necesidad de una regulación que minimice los posibles daños y garantice la seguridad.
En China, hasta diez ministerios están colaborando para elaborar una regulación específica para la IA, según Zeng Yi, investigador de la Academia China de Ciencias. Los representantes chinos enfatizaron que el futuro de la IA debe ser decidido por todos los países y no dictado por los desarrollados.
El país ya ha aprobado regulaciones provisionales para los servicios de IA, estableciendo límites para el contenido generado y enfatizando el respeto por valores fundamentales, ética profesional y la seguridad nacional.
A pesar del rápido avance tecnológico en IA por parte de empresas chinas como Baidu, Tencent y Alibaba, las preguntas sobre la aplicación de esta tecnología persisten debido a la estricta censura gubernamental en China.